Los avances tecnológicos determinan el futuro en cada aspecto de nuestra vida. Hace unos años ni siquiera imaginábamos cómo nos iba a cambiar la vida. Sin embargo, en la actualidad es extraño ver a alguien que no esté siempre acompañado de su smartphone y lo use para todo o que haga cualquier gestión sin ayuda de Internet. Nos encontramos en un momento de “digitalización” tan avanzado que incluso cosas tan típicas como pagar en efectivo o leer un libro físico se están empezando a quedar obsoletas.
Esta evolución es un proceso imparable que debemos aceptar y sacarle el máximo provecho. Las etiquetas electrónicas son la mejor arma estratégica disponible para hacerlo. Su funcionamiento se basa en la sustitución del papel por papel electrónico que permite mostrar más información de forma inmediata desde una central. Suponen una revolución en la relación con el cliente gracias a la incorporación de la tecnología en esta ecuación comunicativa para fidelizar a nuestra audiencia.
Las etiquetas electrónicas se pueden usar en varios sectores y en cada uno de ellos tiene unos beneficios específicos, pero siempre tiene uno en común: mejora la relación con el cliente.
Las etiquetas electrónicas y el retail
El retail es un sector que está constantemente cambiando desde la llegada de las nuevas tecnologías. El e-commerce sigue en auge y las tiendas físicas deben mejorar la experiencia de compra si quieren competir contra esto.
El cliente ya no busca simplemente la compra de servicios o productos sino una experiencia de compra completa. Cumplir con estas expectativas e incluso mejorarlas puede ser clave a la hora de fidelizar a nuestros clientes.
De la misma forma, las tiendas buscan optimizar sus presupuestos y aumentar la productividad de sus empleados sin descuidar ningún aspecto de la atención al cliente. Esto, muchas veces, parece una tarea complicada pero la tecnología nos ofrece herramientas que nos ayudan.
Las etiquetas electrónicas son la solución ideal para que las tiendas puedan dar un giro a la forma en la que se relacionan con los clientes mientras aumentan la productividad.
Suponen ahorro de tiempo y de dinero para el establecimiento, acaba con los errores humanos que puedan suponer un coste a la empresa y mejora la apariencia de la tienda, dándole una imagen mucho más actual. La posibilidad de gestionar los precios de forma automática desde una misma ubicación a todas las tiendas de una cadena posibilita emplear técnicas como el “surge pricing”, ideal para cadenas de tiendas.
Además, permite ofrecer información personalizada a cada cliente según, por ejemplo, sus alergias o preferencias, gestionar promociones especiales y conectar el mundo online con el offline (omnicanalidad) mediante códigos QR o localizar el producto en la tienda mediante un sistema de geolocalización.
Todo esto permite al comercio sorprender a los clientes y así, fidelizarlos. Las tiendas del futuro llegan con fuerza y hay que estar al día y ser pioneros en nuestro sector si queremos mantener a nuestros clientes.
Las etiquetas electrónicas y la hostelería
En el ámbito de la hostelería, el turismo es una actividad económica que ha experimentado un aumento increíble en los últimos años y cada vez son más los negocios relacionados con este sector que surgen.
Los hoteles y los restaurantes son, quizá, los que más crecimiento han visto y donde más competencia ha surgido. Para lograr destacar entre la multitud deben diferenciarse de sus competidores proporcionando una experiencia de usuario inolvidable.
En el caso de los restaurantes del tipo bufet y de los hoteles las etiquetas electrónicas les permiten la automatización del cambio de nombres de los platos. Esto les ahorrará mucho tiempo, teniendo en cuenta que este proceso se lleva a cabo tres veces al día. De este modo, los empleados se podrán centrar en actividades que aporten valor al negocio como atender a los comensales.
Además, el formato y la posibilidad de incorporar gráficos facilita incorporar información relevante como el listado de alérgenos e incluso personalizarlas con el logo del establecimiento.
La variedad de accesorios y la compatibilidad con un amplio rango de temperaturas y con varios idiomas favorece que las etiquetas electrónicas se pueden situar en el lugar deseado (ya sea en exterior, nevera o cerca de un plato caliente) y ofrezcan información en otros idiomas para satisfacer a clientes de todos los lugares del mundo. Esto último es especialmente relevante en zonas muy turísticas como el mediterráneo o las grandes ciudades como Madrid o Barcelona.
Las etiquetas electrónicas y los negocios
En el ámbito de los negocios, las salas de reuniones y otros espacios comunes suelen estar muy demandadas, y suele haber también incorporaciones o cancelaciones de última hora. Esto puede ocasionar confusión, espacios desaprovechas o retrasos indeseados.
Con las etiquetas electrónicas podrás mejorar mucho el funcionamiento de las salas de reunión, ya sean de tu empresa, de alquiler en tu hotel, centro de negocios o coworking
Las etiquetas electrónicas pueden ayudar en varios ámbitos. Por una parte, pueden servir para identificar a los miembros de una reunión. Con las etiquetas con doble pantalla la información la pueden ver tanto el propio miembro como el resto de los asistentes. Además, también nos pueden servir como señalización, es decir, para dar información sobre el espacio: qué reunión se va a celebrar o quien lo va a ocupar, a qué hora, información sobre cancelación o cambio de hora o lugar, etc. De esta forma, es posible reaccionar de forma rápida ante cambios inesperados y dar un buen servicio.
Nuestra empresa ETE lleva varios años en el sector y nuestro objetivo es proporcionarsoluciones técnicas a empresas para digitalizarse y adaptarse al mercado fácilmente. Es por eso que tenemos en cuenta todo tipo de empresas y somos la primera empresa en España que ofrece kits de etiquetas electrónicas pensados para pequeñas y medianas empresas totalmente personalizados según el sector del que se trate.
El trato personalizado con el cliente y la gran variedad de soportes y accesorios marcan la diferencia y hacen que nuestros clientes sean de sectores tan variados como la moda, la alimentación, la electrónicas, el turismo o los negocios.