Mudanza en Sevilla y limpieza ¿son compatibles?

Sabemos de antemano, que el proceso de mudarse puede llegar a ser muy estresante y difícil. Pero si, además, tenemos que limpiar la casa y dejarla como los chorros del oro, el esfuerzo y agobio se duplican.

Aunque sea obvio, muchas veces nos olvidamos de limpiar ciertos puntos del hogar, ya sea porque no nos damos cuenta o nos olvidamos. Y como es normal, antes de dejar una casa en la que hemos vivido durante un tiempo, lo correcto es limpiarla en profundidad.

Es por ello que hoy hablaremos sobre como sobrellevar una mudanza en Sevilla y la limpieza de una casa.

Aquí dejamos una serie de consejos para limpiar la casa y no volvernos locos con la mudanza. Son fundamentales si queremos dejar como nueva cualquier casa

Las paredes

Con el paso del tiempo no nos damos cuenta, pero las paredes son de las que cosas que más se ensucian en una casa. No es que cojan color, sino suciedad como tal. Pero es que claro… como las paredes no siempre se ven bien, porque los muebles están de por medio, pero cuando empezamos a retirar los muebles y demás, es cuando vemos el estado en el que están.

Antes de pintar las paredes, encárgate de prepararlas. Es decir, quitar todos los tacos, ganchos, alcayatas, etc. Tapa todos los agujeros con una masilla especial y después pasa por las paredes un paño húmedo con jabón para quitar la máxima suciedad posible.

Una vez que nuestras paredes estén adecentadas es tiempo de pintarlas. No hay que olvidarse del techo también. Podemos asegurar que por mucho que se limpie una casa en profundidad, que si las paredes siguen estando muy sucias seguirá pareciendo que la casa no está limpia.

Los techos

Los techos son los gran olvidados de las limpiezas. Limpiarlos suele ser de lo más molesto, no siempre se accede bien a ellos, por lo que cuanto antes se haga mejor. Utilizar un plumero no está mal, pero mejor un trapo levemente humedecido para que así no se esparza el polvo.

Las ventanas

Las ventanas no es que sean muy fáciles de limpiar, son bastante trabajosas. Para limpiarlas bien, tanto por dentro como fuera hay que descolgarlas una por una. No siempre lo vemos, pero hay mucha suciedad que se mete por los marcos de las ventanas, y la única forma de poner eliminarlo es descolgándolas y metiéndolas, por ejemplo, en una bañera. Se mojan y se frotan con un limpiador específico para cristales y las secamos con un paño evidentemente seco. En principio puede parecer un engorro, pero aseguramos que al final es el proceso más fácil y sobre todo rápido para limpiar las ventanas.

Respecto los marcos de la ventana, si son de plástico no requerirán de muchos productos, sin embargo, si son de madera o aluminio si que pueden necesitar un producto especial.

Los rodapiés

Otro de los gran olvidados, los rodapiés. En ellos se acumula mucho polvo, como en cualquier otra superficie, marco, mueble, etc. Quienes le prestan atención son lo que están acostumbrados a limpiar casas y hacer limpiezas profundas. Limpiarlos es muy fácil, ya sean pasándoles la escoba o la aspiradora. Si vemos que con eso es insuficiente, se les puede dar con un agua y jabón.

Esquinas olvidadas

Hablamos de esquinas olvidadas, de aquellos lugares que ni siquiera apreciamos. Como pueden ser, las entradas del aire acondicionado, o detrás de los radiadores. Son superficies fáciles de limpiar, ya que pasándoles un paño húmedo con algún producto ordinario de limpieza es suficiente.

La cocina y el baño

La cocina es un espacio de la casa que merece un apartado para ella misma. Normalmente en las cocinas en donde hacemos mucha vida, se utilizan todos los días y numeras veces. Por lo que es más que necesario realizar una limpieza en profundidad. Empezando por los muebles, una vez que se hayan vaciados, limpiarlos por dentro y por fuera con lejía, así nos aseguraremos de que se desinfectan. Ya después si queremos, podemos darles a los muebles una segunda pasada con algún jabón que tenga un olor agradable.

Pasamos a la campana extractora, la cual mérita especial atención. Lo primero es desinstalarla, para poder limpiar bien cada una de sus partes. Utilizar un producto especial desengrasante es lo idóneo, ya que como era de esperar se ha ido acumulando mucha grasa. Limpiar la campana, requiere de un esfuerzo y tiempo que muchas veces no queremos gastar y menos en eso, pero hay que pensar que es una parte de la cocina que no limpiamos ni todos los días, ni todas las semanas.

Con el baño pasa exactamente lo mismo, son zonas de la casa muy concurridas que requieren de más limpieza que otras. Todo lo que viene siendo retrete, bidé, lavabo hay que desinfectarlos y limpiarlos bien con lejía.

Los suelos

Lo último en limpiar en una casa son siempre los suelos. Hay muchos tipos de suelos, de mármol, parqué, terrazo, etc. Dependiendo del que se tenga se deberá de utilizar un producto u otro. Cada suelo requiere de un tratamiento y si no le prestamos cuidado puedes estropearse con más rapidez.

Estos consejos no se tienen que aplicar solo en el caso de que vayamos a dejar una casa. También sirven perfectamente cuando entramos a la casa nueva, que no está del todo limpia o no tanto como nos gusta. Siempre es bueno volver a limpiar, porque no sabemos cómo han limpiado los demás.

Las mudanzas en Sevilla no tienen por qué ser caóticas y llevarnos al punto de colapso. Hay que saber cuales son las cosas importantes a abordar primero y seguir un orden tanto en la mudanza como en la limpieza.

Siempre hay que pensar que lo que ahora nos está costando mucho esfuerzo y tiempo, a la larga es un beneficio. Al final la ilusión y alegría de saber que nos mudamos a un nuevo hogar tienen que estar ahí.